Tibi-Tibe
El aspecto único del Tibi-Tibe combina una cabeza pequeña como la de una paloma y un pico corto con un cuello largo y delgado, un cuerpo regordete y unas patas medianamente largas, todo lo cual parece en desacuerdo entre sí, confiriéndole un aspecto desigual pero extrañamente elegante.
Playerito distintivo encontrado en áreas con gramíneas cortas. Con frecuencia es visto perchado en postes de cerca o en la copa de pequeños arbustos. En general con marcas de color café y beige, cabeza pequeña, cuello largo, ojo grande y pico amarillo con punta negra. La cola larga y el desplazamiento con aleteos poco profundos le dan una apariencia única en vuelo. Canto típicamente producido en vuelo; comienza con un trino suave y termina con un fuerte silbido que sube y baja. Migra a Suramérica en invierno, particularmente Paraguay y el norte de Argentina, y durante la migración es posible verlo en Venezuela en llanuras.
Históricamente, el tibi-tibe era muy cazado. En las últimas décadas del siglo XIX, se podía cazar 100/d en Colony, Kansas Estados Unidos de Norteamerica. La llegada de vagones de ferrocarril con refrigeración primitiva hizo más rentable la caza de mercado y permitió que se enviaran vagones cargados de zarapito esquimal (Numenius borealis) y tibi-tibe de Kansas y Nebraska a comerciantes de San Luis y tan al este como Boston. En ambas ciudades se vendían a 1,25 dólares la docena.
La presión de la caza también fue fuerte en las pampas de Argentina hasta finales del siglo XIX, persistiendo hasta bien entrado el siglo XX. De hecho, en 1921, el Tibi-Tibe seguía siendo “un plato habitual en los hoteles y restaurantes de mayor categoría de la ciudad de Buenos Aires”. A día de hoy, muchos restaurantes independientes de Argentina siguen llevando el nombre de “Batitú”, de la época en que el Tibi-Tibe era uno de sus platos favoritos (J. P. Myers, comunicación personal). La disminución del número de ejemplares es más evidente en Sudamérica que en Norteamérica, con un nuevo declive desde la década de 1950. La caza sigue siendo un problema en el Caribe insular, especialmente en Barbados.
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